Tenía 34 años: murió una figura destacada del folklore en Buenos Aires y hay dolor en la música

El ambiente del folklore está de luto porque murió uno de los jóvenes referentes de la música popular en Buenos Aires. El artista tenía 34 años y perdió la vida luego de batallar contra una dura enfermedad, motivo por el cual tanto colegas como seguidores suyos lo despiden con pesar en las redes sociales.
Se trata de Gustavo Zampe, uno de los integrantes de la banda de folklore Los Chaza de La Plata. Con su corta edad, dejó una huella en el ambiente de la música popular argentina.

No se dieron a conocer detalles de su enfermedad y los restos del músico, que vivía en La Plata desde 2011, fueron exhumados sus restos en la localidad bonaerense de Roque Pérez, donde nació.
En las redes sociales, muchas personas lo despidieron con pesar. “¡Que en paz descanses Zampe! Fuiste un gran compañero"; “Que triste... muy jovencito. Fuerzas a su familia”; “Gran artista, y más que nada excelente persona. Brilla alto”, fueron algunos de los comentarios expresados por la gente.
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La trayectoria de Gustavo Zampe, el joven artista de folklore que murió a los 34 años
Nacido en Roque Pérez, Gustavo Zampe se radicó en La Plata en 2011, donde desarrolló su carrera artística y participó en diversos proyectos vinculados a la Facultad de Artes de la Universidad Nacional de La Plata.
Desde que a los 12 años comenzó a estudiar guitarra y canto, su vínculo con la música fue inquebrantable. Con el tiempo, se convirtió en una de las voces más representativas del nuevo folklore bonaerense. Quienes lo conocieron lo describen como “un artista de raíz, un soñador con los pies en la tierra, un trabajador de la música que amó profundamente lo que hacía”.
En 2017 se incorporó al grupo Los Chaza, con el que recorrió escenarios de distintas provincias. La banda eligió su tema Donde mis sueños se encuentran para titular el disco que lanzaron en 2020, un reconocimiento a su talento y sensibilidad. Su paso por el conjunto lo consolidó como una figura clave dentro del relevo generacional del folklore argentino.
Ese mismo año, presentó su primer álbum solista Convergencia conformado por nueve canciones. Con este material, Zampe reafirmó su estilo y su mirada poética sobre la música popular, combinando técnica y emoción para acercar el folklore a nuevas generaciones.
A pesar de sus múltiples compromisos, el músico nunca perdió el lazo con su pueblo natal. Cada regreso a Roque Pérez era una celebración, como aquella recordada presentación en la Fiesta de la Carne de Cerdo, donde volvió a cantar frente a su gente, con la calidez y la alegría que lo caracterizaban.

















