A 1 hora de Buenos Aires: el pueblo donde un antiguo hotel ferroviario se convirtió en un misterio

A poco más de una hora de la Ciudad de Buenos Aires, existe un rincón detenido en el tiempo. Se trata de un pequeño pueblo del interior de la provincia de Buenos Aires donde el silencio de las vías, las casonas centenarias y un viejo hotel abandonado y esta historia del pueblo se convirtió en un verdadero enigma para quienes llegan atraídos por su historia del hotel fantasma ferroviario que puede ser una escapada distinta para disfrutar de un fin de semana.
La ciudad en cuestión es Altamirano, partido de Brandsen, que nació al calor del ferrocarril y hoy mantiene intacto su espíritu de pueblo. Frente a la estación, todavía se levanta la estructura del Antiguo Hotel Colonial, conocido por los vecinos como “el hotel fantasma”.

En su época de esplendor alojó a maquinistas, operarios y pasajeros que pasaban por la zona, pero con la caída del servicio ferroviario, el edificio quedó abandonado y empezó a ser rodeado de leyendas.
La historia del hotel fantasma ferroviario de Altamirano
Los habitantes de Altamirano aseguran que durante las noches, se escuchan ruidos provenientes del interior del viejo hotel. No solo eso, sino que otros juran haber visto luces encendidas pese a que no hay conexión eléctrica activa. Más allá del mito, el edificio es una joya arquitectónica de otro tiempo: con su fachada de estilo colonial y sus paredes gastadas, se convirtió en un símbolo del pasado ferroviario argentino.
También podría interesarte
Más allá del misterio, Altamirano conserva un aire rural que invita al descanso. Las calles de tierra, los árboles que bordean las vías y los almacenes de campo aún en pie forman parte de su encanto.
Además, la zona ofrece propuestas gastronómicas típicas: parrillas, casas de té y pequeñas posadas donde los turistas pueden disfrutar del clásico asado bonaerense o de una merienda casera frente a los interminables campos de la llanura pampeana.

Cómo llegar a Altamirano desde Capital Federal
Desde la Ciudad de Buenos Aires se accede por la Ruta Provincial 210, tomando luego el desvío hacia Brandsen y, finalmente, a Altamirano. El viaje dura aproximadamente una hora.