Ecológico y biodegradable: cómo utilizar la yerba usada en las macetas

El paso a paso de cómo aprovechar la yerba mate para nutrir tus plantas y sumarte a la moda sustentable.
Yerba mate.
Yerba mate. Foto: Unsplash

La yerba mate es mucho más que el ingrediente para la bebida símbolo de la cultura argentina, sino que, además, puede ser reutilizada e incluso darle una segunda vida útil antes de que termine en la basura. Una de las formas más originales y ecológicas de reutilizarla es realizar macetas de yerba para que los nutrientes esenciales ingresen a la planta.

¿Por qué es tan efectivo? La yerba mate contiene fósforo y nitrógeno, dos nutrientes clave que favorecen el crecimiento y desarrollo de las plantas. Al utilizarlas, se reducen los residuos orgánicos, nutre los cultivos y es una alternativa sustentable al abono para las flores y plantas.

Yerba Mate, mate
Yerba Mate, mate

Paso a paso: cómo preparar una maceta ecológica con yerba mate usada

Una forma creativa y sustentable de reutilizar la yerba del mate es darle una nueva vida como recipiente para tus plantas. Con unos pocos materiales y algo de paciencia, podés crear tu propio contenedor ecológico para plantas pequeñas.

Materiales

  • Yerba mate usada (seca y húmeda)
  • 2 tazas de harina
  • 2 tazas de agua
  • Un chorrito de vinagre (para prevenir hongos)
  • Moldes (pueden ser latas, compoteras o cualquier recipiente)
  • Papel film
  • Guantes para amasar
  • Bonus track: podés usar los restos de yerba de tus mates diarios. Asegurate de secar una parte al sol para lograr una mejor consistencia.
Plantas, jardín. Foto: Freepik

Cómo hacer tu maceta de yerba mate

Juntá la yerba y separá una parte para dejarla secar al sol y mantené otra húmeda: ambas se usarán en diferentes etapas de la mezcla. En una olla, mezclá la harina con el agua de a poco hasta obtener una pasta homogénea. Llevá la mezcla al fuego y revolvé hasta que espese. Agregá un chorrito de vinagre para evitar la aparición de hongos.

Con el engrudo aún caliente, incorporá primero la yerba húmeda para bajar la temperatura y empezá a amasar con guantes. Luego agregá la yerba seca de a poco hasta formar una masa compacta y moldeable.

Después, forrá el molde elegido con papel film. Colocá la masa de yerba en la base y subí por los costados, presionando bien para que las paredes queden gruesas y firmes. Ubicá la maceta al sol durante un día. Una vez seca, retirala del molde y quitá el papel film. Dala vuelta para que termine de secarse por completo: notarás que adquiere un tono más claro y firmeza.

Por último, con un clavo o una herramienta fina, hacé un agujero en la base para que el agua pueda drenar y no dañe las raíces de la planta.