El futuro que planea Israel para la Franja de Gaza: de la “ciudad humanitaria” a un gobierno que “no busque destruir” su país

Benjamin Netanyahu, primer ministro israelí, dio algunas pistas sobre lo que le depara al enclave palestino una vez que se llegue a un alto al fuego permanente.
La Franja de Gaza.
La Franja de Gaza. Foto: REUTERS

Mientras la ONU y los principales organismos de derechos humanos acusan a Israel de querer levantar un campo de concentración en Gaza, lo único que trascendió del futuro que planea el Estado judío para la Franja es la “ciudad humanitaria” que quieren construir en las ruinas de Rafah y donde pretenden concentrar a toda la población gazatí.

A esta situación se le sumó una declaración del primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, quien insistió en que quiere “un futuro real para la Franja de Gaza”, y que eso pasa porque el Gobierno del enclave palestino esté en manos de “personas que no busquen la destrucción de Israel y que quieran vivir en paz” con este país.

Ataques incesantes en Gaza. Foto: REUTERS

“Tendremos que encontrar una solución que permita a los palestinos actuar por sí mismos, si no buscan la destrucción de Israel, y que permita a Israel conservar los poderes necesarios para garantizar nuestra seguridad”, dijo el mandatario israelí en un vídeo de más de ocho minutos de duración.

Sobre el acuerdo de alto el fuego que, sigue sin llegar tras más de 21 meses de ofensiva en Gaza, Netanyahu se limitó a decir que su compromiso es “la victoria” y rescatar a los 50 rehenes (las autoridades israelíes estiman que solo 20 siguen con vida) que el grupo islamista palestino Hamás todavía retiene en la Franja.

¿Un alto al fuego en la Franja de Gaza?

Israel presentó hoy a los mediadores un tercer mapa del despliegue de las tropas israelíes en Gaza. En esta última propuesta de retirada, el país ubicado en Oriente Medio habría mostrado una mayor flexibilidad respecto a la posición de sus fuerzas israelíes entre los corredores de Morag y Filadelfia, en el sur de la Franja de Gaza y que ahora controlan.

Hamás insiste en que no firmará ningún acuerdo de alto el fuego con Israel, que permitiría la liberación de los rehenes, si las tropas israelíes no se retiran totalmente de la Franja y llega el fin definitivo de su ofensiva.

El grupo palestino también exige al gobierno de Netanyahu que sean las agencias de la ONU las que vuelvan a hacerse cargo de la distribución de la ayuda humanitaria y no la polémica Fundación Humanitaria para Gaza en cuyos complejos centenares de palestinos murieron desde finales de mayo por disparos mientras esperaban para recibir comida.